La reforma política quedó pendiente en la provincia

Solo se impuso una suspensión transitoria de las PASO.

Una de las promesas de campaña del gobernador Gustavo Sáenz fue una amplia reforma política para limitar los mandatos en los cargos ejecutivos y las reelecciones indefinidas, evitar categorías dobles y simultáneas en las elecciones, mejorar la representación y fortalecer el sistema republicano en la provincia.

En abril, el Ejecutivo remitió a la Legislatura un proyecto de reforma constitucional que también contemplaba modificaciones en la Justicia, el Consejo de la Magistratura y en órganos de control como la Auditoría General de la Provincia.

La hoja de ruta de la iniciativa, en la que había empezado a trabajar en enero una mesa multisectorial, fue el “Consenso de cambios para el progreso de Salta”, un acta compromiso que suscribieron 2014 representantes del PJ, la UCR, el PRO, el Frente Primero Salta y otras fuerzas políticas.

La pandemia, que por entonces asomaba con las primeras semanas del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO), trastocó completamente las prioridades y el proyecto quedó congelado en la Legislatura, donde la reforma constitucional había despertado recelos en los bloques opositores.

La discusión quedó reabierta a mediados de septiembre a través de la Comisión de Legislación General del Senado, que abrió una ronda de diálogo con las fuerzas políticas enfocada solo en las reglas electorales. En el interín, Diputados aprobó un proyecto de ley que impulsaba el reemplazo del costoso y cuestionado sistema de votación electrónica por la boleta única de papel. Además, se eliminaban las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) y se promovía una unificación de los comicios provinciales y nacionales en 2021, por razones financieras y epidemiológicas.

La media sanción de Diputados terminó trabada en el Senado, cámara desde la cual la postura del Ejecutivo terminó imponiéndose sobre el consenso mayoritario de las fuerzas políticas que pedían eliminar el voto electrónico. Además, solo se estableció una suspensión transitoria de las PASO, que se limitará únicamente al próximo turno electoral.

En la Cámara alta también quedó atada la suerte de la Ficha Limpia, proyecto de ley al que Diputados le dio media sanción y que busca evitar que personas con condenas penales puedan presentarse como candidatos.

La reforma anunciada preveía una unificación de mandatos de cargos electivos (gobernador, vice e intendentes) a cuatro años, con una sola reelección.

En el caso de senadores y diputados se mantendría la duración de los mandatos de cuatro años, con la salvedad de limitar la posibilidad de reelección a un solo período inmediato. La reforma, asimismo, extendería a cuatro años el mandato de los concejales, ya que Salta es la única provincia en la que es de dos años. La posibilidad de reelección de los concejales se limitará a un solo período inmediato.

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